Madrid – Una tragedia con tintes de comedia cósmica se desató anoche cuando el famoso farolillo mágico lanzado por la redacción de Diario ASDF durante la tradicional fiesta de San Juan comenzó a conceder todos y cada uno de los deseos de los asistentes, generando una ola de euforia colectiva que no se veía desde la invención del bizcocho en taza.
Todos celebraban. Todos brillaban. Todos flotaban en una nube de regocijo y fuegos artificiales internos. Todos… excepto la tribu virtual conocida como “los Redbirds”, un grupo que, según investigaciones recientes y declaraciones de exmiembros, “no junta media neurona colectiva desde 2021 y va para peor”.
El Farolillo Mágico: El Genio con Estándares Éticos
“El farolillo salió de mis manos y sentí algo diferente. Como si supiera quién merece ver sus sueños cumplirse”, explicó emocionado el redactor jefe de Diario ASDF, mientras sorbía un mojito con lágrimas en los ojos y brillantina en la frente. “Fue cuando vi que a la comandante Chus Madrileña le explotó el cóctel de gambas encima y supe que esto no era casual”.
Al parecer, el farolillo, de manufactura unicornial pero energía claramente antiwoke, recorrió los cielos concediendo deseos: curaciones, trabajos nuevos, reconciliaciones familiares, incluso un reencuentro improbable entre dos gemelos separados al nacer que habían discutido en TikTok por un meme de perros vs gatos. Pero cuando sobrevoló el foro de los Redbirds, el farolillo se detuvo en seco, hizo un giro de 180 grados, y se fue silbando.
“No les vamos a dar ni una bolsa de caramelos rancios”, habría dicho el farolillo en un susurro etéreo, según testigos con sensibilidad mística y acceso a la medicación que no se toma Elsa.
Marta Puente Recibe Flores (Literal y Metafóricamente)
En medio del caos mágico, la conocida streamer y activista Marta Puente, que está muy viva, recibió un ramo inesperado. Las flores le fueron enviadas por su hermana, con quien no hablaba desde el incidente de “la tostadora antifeminista en la bañera”, y que aprovechó el hechizo de reconciliación del farolillo para sanar heridas familiares.
“Fue como si el universo me dijera: ‘Aquí tienes un abrazo sin cringe, Marta’”, declaró entre lágrimas y polen. La escena se viralizó y ha sido adaptada por Netflix como una miniserie de seis capítulos protagonizada por cetáceas que aprenden a amar.
“Soy la Víctima”, Dice Mientras Pide Reportes Masivos
Mientras tanto, la líder espiritual de los Redbirds, Chus Madrileña —conocida en sus círculos como “La Comandante del Tweet Condescendiente”—, vivió una jornada emocionalmente intensa. Tras lanzar insultos transfóbicos encadenados y exigir reportes masivos contra personas trans “por su bien”, se vio envuelta en una paradoja de acoso autoinfligido.
“Me están acosando simplemente porque insulto gente. ¿Dónde está mi libertad de expresión si no puedo deshumanizar sin consecuencias?”, gritó en su espacio de Twitter rodeada de cinco bots con nombres como SoyUnaPensador4deRomán y LibreYWoke95. Luego añadió: “Yo no soy clasista, pero la gente pobre debería aprender a no usar bandejas de plástico para comer”.
En un giro dramático, pidió protección oficial contra lo que ella describió como “el lobby de los que tienen muchos derechos organizado”, mientras compartía imágenes de tweets de trans insistiendo en que la acosaban.
¿116 Redbirds y Ni una Neurona que Pueda con el Sudoku?
En un intento desesperado por revertir su suerte, la tribu Redbird propuso un experimento: despedir a varios trolls y dejar sólo a los “más pensantes” del grupo —un total de 116 personas que, entre todos, intentaron completar un Sudoku nivel fácil. El resultado fue desolador.
“Lograron sumar tres neuronas. Tres. Entre 116 personas”, confirmó el científico independiente Dr. Membrillo Ledezma. “Y una de ellas venía de un hámster que accidentalmente se metió en la sala”.
El informe del experimento concluye que la capacidad cognitiva promedio del colectivo Redbird ha sido superada por varias colonias de mejillones que, al menos, saben cuándo cerrar la boca.
El Epílogo: El Farolillo Siguió su Viaje
Al cierre de esta edición, el farolillo fue visto cruzando la frontera hacia Portugal, donde ya ha empezado a cumplir sueños en comunidades rurales, asegurando que todo aquel que no practique el odio organizado tiene derecho a una pizca de magia en su vida.
“¡Queremos nuestro deseo!”, gritaban los Redbirds, que se autoconvocaron en su servidor de Discord para organizar una manifestación de emojis ofensivos.
El farolillo no respondió. Según los expertos en narrativa cósmica, la magia no responde a quienes no han aprendido ni lo básico de la empatía.
Moraleja
Cuando lances un deseo al cielo, asegúrate de que no viene acompañado de prejuicios, sarcasmo malintencionado y un máster en clasismo de la Universidad de La Ignorancia™. Porque la magia no es tonta, y los farolillos tienen estándares.
Y sobre todo: no seas un Redbird.