Madrid, 31 de marzo de 2025 – En un giro inesperado pero perfectamente alineado con su estilo combativo, la exministra de Derechos Sociales, Ione Belarra, ha sorprendido a propios y extraños con una propuesta revolucionaria para solucionar la crisis de vivienda en España. Durante un mitin en Vallecas, Belarra afirmó con firmeza: “Si no tienes dónde meter a tus hijos, no pasa nada, le pegas una patada en la puerta al piso de un banco y listo. Es de primero de okupa”. Sin embargo, esta declaración le ha valido una investigación judicial por presunta incitación a cometer un delito, según ha confirmado la Fiscalía esta mañana.
La declaración, que arrancó aplausos entre los asistentes y ceños fruncidos entre los directivos de la banca, llega en un momento en que el precio de los alquileres sigue disparado y las hipotecas son un sueño inalcanzable para muchos. Según Belarra, “los bancos tienen casas vacías como quien colecciona cromos, y mientras tanto, la gente duerme en la calle. Es hora de redistribuir con el pie”. Pero lo que para ella era una solución creativa, para la justicia podría ser un paso en falso: el juez encargado del caso ya ha citado a la política a declarar, argumentando que sus palabras podrían alentar actos ilegales.
Fuentes cercanas a Belarra aseguran que no se trata de una metáfora. Al parecer, la exministra estaría preparando un taller práctico titulado “Patada a la Vivienda 101”, donde se enseñarían técnicas de precisión para no dañar el marco de la puerta y consejos legales para negociar con la policía desde el salón recién ocupado. “Es un derecho humano, no un allanamiento”, explicó una de sus asesoras, mientras practicaba un golpe seco contra un tablón de madera. La Fiscalía, sin embargo, no parece compartir esa visión y ha calificado el discurso como “una clara apología delictiva”.
Por su parte, el sector bancario ha reaccionado con una mezcla de incredulidad y pánico. Un portavoz de una conocida entidad financiera comentó: “Esto es un ataque a la propiedad privada. ¿Qué será lo próximo, que nos pidan las claves del Wi-Fi?”. Algunos empleados de banca, en privado, confesaron que no les vendría mal un curso de defensa personal “por si las moscas”, mientras miran con recelo las puertas de sus sucursales.
En redes sociales, el hashtag #PatadaAlBanco ya es tendencia, con memes que van desde tutoriales de artes marciales hasta imágenes de Belarra en pose de karateka frente a una sucursal del BBVA. Mientras tanto, el Gobierno guarda silencio, aunque fuentes anónimas aseguran que el presidente Sánchez estaría considerando incluir la propuesta en el próximo pacto de coalición, “pero con un enfoque más dialogado, tipo empujoncito a la puerta”.
La investigación judicial ha añadido leña al fuego de un debate que ya estaba caliente. Algunos ven en Belarra a una Robin Hood moderna, mientras otros temen que España se convierta en un país de puertas desencajadas y juzgados colapsados. Sea como sea, la exministra parece decidida a seguir pateando el tablero político, aunque esta vez podría costarle más que un simple titular.
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