Madrid, 10 de marzo de 2025 – Anoche, el programa “Cuarto Milenio” dejó a toda España al borde del colapso nervioso tras un episodio que combinó terror, comedia y un toque de locura en la tienda de animales exóticos de Roberto Vaquero, el controvertido activista político y dueño de un negocio que, al parecer, es un portal a lo desconocido.
Todo comenzó cuando Iker Jiménez, el carismático presentador, junto al doctor José Cabrera y el medium Aldo Linares, descendieron al sótano de la tienda en busca de respuestas sobre fenómenos paranormales. Sin embargo, lo que encontraron fue un auténtico circo de lo sobrenatural: puertas que se cerraban de golpe, psicofonías que proclamaban frases como “pues vaya amigo parece que sí tengo pelo” (mientras una bombilla explotaba), y un calvo misterioso que persiguió a los protagonistas por los pasadizos como si fuera el villano de una película de terror de bajo presupuesto.
Las cosas escalaron rápidamente cuando apareció una momia “más seca que la mojama”, que el doctor Cabrera insistió en autopsiar sin éxito para determinar su identidad. Pero el clímax llegó con la aparición de un bucardo –la cabra montesa pirenaica declarada extinta en 2000–, que irrumpió en escena como si hubiera resucitado para unirse a la fiesta paranormal. “¡Es un milagro de la ciencia… o del más allá!”, gritó Iker, antes de quitarse toda la ropa en un intento desesperado de ser “más aerodinámico” para escapar del animal.
Trágicamente, el episodio tomó un giro macabro cuando el doctor Cabrera, en un momento de calma para fumarse un cigarrillo, vio cómo su cabeza explotaba inexplicablemente, dejando a Iker y Aldo en estado de shock. “Nunca había visto algo así en televisión”, tuiteó el usuario @negro_milano, reflejando el sentir de millones de espectadores pegados a la pantalla.
estoy en SHOCK con lo que está pasando EN DIRECTO en cuarto milenio han bajado iker jimenez, el doctor cabrera y el medium aldo linares al sótano de la tienda de animales de roberto vaquero y están pasando cosas que hielan la sangre
Las redes sociales explotaron con teorías: ¿es el sótano de Vaquero un portal interdimensional? ¿El bucardo es un mensaje del cambio climático o simplemente un fanático de Iker? Algunos especulan que el activista político podría estar ocultando experimentos genéticos en su tienda, mientras otros culpan a la “energía negativa” que Aldo Linares detectó, posiblemente vinculada a los crímenes de mascotas exóticas que Vaquero ha negado vehementemente.
Roberto Vaquero, conocido por sus posturas radicales contra el feminismo y la migración, emitió un breve comunicado: “Mi tienda solo vende loros y serpientes venenosas, no fantasmas ni cabras extintas. Esto es obra de la burguesía liberal para desprestigiarme”. Por su parte, Iker Jiménez, aún recuperándose del trauma, anunció que planea lanzar una línea de ropa aerodinámica inspirada en su huida desnuda.
“Cuarto Milenio” ha prometido una investigación más profunda en su próximo episodio, aunque los fans ya están pidiendo que Iker mantenga la ropa puesta… o al menos, que traiga un casco para el doctor Cabrera. Mientras tanto, el bucardo sigue siendo el verdadero protagonista de esta historia, galopando hacia la leyenda urbana más absurda de 2025.