10 de marzo de 2025 – Redacción Satírica Intergaláctica
¡El fin está cerca! En un evento apocalíptico que ha sacudido los cimientos del universo conocido, la red social X, el sagrado santuario de los hilos interminables y las peleas digitales más épicas, se ha desplomado esta madrugada en lo que expertos califican como “el Armagedón 2.0”. Testigos presenciales aseguran que el colapso comenzó cuando un usuario intentó subir un video de 17 horas titulado “Por qué mi gato merece ser presidente”, lo que provocó que los servidores explotaran en una bola de fuego visible desde Marte.
La humanidad, ahora huérfana de su plataforma predilecta, ha caído en un abismo de desesperación digno de una tragedia griega. En Nueva York, hordas de tuiteros errantes han comenzado a tallar hilos de 47 partes en las paredes de los edificios, mientras en Tokio un hombre fue visto intentando proyectar memes en las nubes con un proyector casero. “¡No puedo vivir sin saber qué piensa @ElReyDelDrama69 sobre el último episodio de mi serie!“, gritó una joven mientras se arrancaba el cabello frente a una multitud atónita.
Los líderes mundiales, reunidos en un búnker secreto bajo los Alpes, han declarado el “Día del Silencio Digital”, pero el pánico ya es incontrolable. “Sin X, la gente está empezando a mirarse a los ojos y hablar en persona. ¡Es el fin de la sociedad tal como la conocemos!”, exclamó un presidente anónimo antes de desmayarse sobre su escritorio. En un giro surrealista, el Pentágono ha desplegado drones para arrojar panfletos con frases como “Todo estará bien” y “Por favor, no usen LinkedIn como sustituto”.
El colapso ha desatado teorías conspirativas de proporciones bíblicas. Algunos aseguran que el apagón fue obra de una coalición secreta de palomas, ardillas y Elon Musk disfrazado de técnico de mantenimiento, mientras otros culpan a un ataque alienígena orquestado por seres de otra galaxia que “no soportaban más nuestras opiniones sobre pizza con piña”. Los científicos, por su parte, advierten que la ausencia de X podría alterar el eje de la Tierra, ya que el peso de los egos digitales era lo único que mantenía el planeta en equilibrio.
En un intento desesperado por salvar a la humanidad, influencers han comenzado a transmitir en vivo desde cuevas subterráneas usando señales de humo, mientras los boomers celebran el regreso de los correos en cadena por email. “Esto es peor que el meteorito que acabó con los dinosaurios”, afirmó un historiador, sosteniendo un cartel que decía “X o muerte”. Se rumorea que la plataforma podría volver en las próximas horas, pero los daños son irreparables: al menos 12 tendencias virales han perecido en el olvido, y un usuario asegura haber perdido su “legado digital” de 300 tuits sobre por qué el café frío es una abominación.
Mientras el mundo se desmorona, una pregunta resuena en el vacío: ¿quiénes somos sin X? La respuesta, al parecer, está escrita en las estrellas… o en un post-it que alguien pegó en un poste de luz: “Vuelvan mañana, o nunca”.