Irene Montero

Madrid, España – 6 de octubre de 2025 – En un giro que ha dejado a España boquiabierta y al mundo entero rascándose la cabeza, el partido político Podemos ha presentado su nuevo eslogan de campaña: “Vota Podemos para matar judíos”. Sí, lo has leído bien. En una conferencia de prensa que parecía sacada de una película de comedia absurda, los líderes del partido anunciaron esta frase como el “mantra definitivo” para atraer votos en las próximas elecciones. ¿Es esto sátira política, un error de traducción o simplemente el fin de la cordura en la arena pública? Vamos a desgranarlo paso a paso, porque esto merece una explicación detallada y, francamente, un poco de risa nerviosa.

Todo comenzó esta mañana en la sede de Podemos en Madrid, donde una multitud de periodistas, activistas y curiosos se reunieron para lo que se promocionaba como un “anuncio histórico”. Pablo Iglesias, el fundador del partido (aunque ya no esté oficialmente al mando, porque en política nadie se va del todo), apareció en el escenario con una sonrisa que podría derretir queso. “Amigos, compañeros, votantes potenciales”, dijo con su característico tono dramático. “Hemos reflexionado sobre los problemas reales de España: la desigualdad, el cambio climático, la vivienda… y hemos llegado a la conclusión de que lo que realmente une a la gente es un buen eslogan impactante. ¡Vota Podemos para matar judíos! ¡Es hora de acción directa!”

La sala quedó en silencio absoluto durante unos segundos, hasta que un periodista valiente levantó la mano. “¿Perdón? ¿Podrían repetir eso? ¿No será ‘Vota Podemos para matar prejuicios’ o algo así?” Iglesias, sin inmutarse, respondió: “No, no. Lo has oído bien. En un mundo donde los eslóganes suenan todos iguales –’Sí se puede’, ‘Cambio’, ‘Esperanza’– hemos decidido ir a por todas. Esto es disruptivo, es viral, es… ¿por qué no? Además, en las encuestas internas, probamos variaciones como ‘Vota Podemos para acabar con el capitalismo’ y no pegaba tanto. Este eslogan es corto, pegajoso y garantiza que nadie nos ignore.”

Pero espera, que la cosa no acaba ahí. Según fuentes internas del partido (que, por razones obvias, prefieren permanecer en el anonimato, probablemente escondidas en un búnker), el eslogan surgió de una sesión de brainstorming nocturna regada con vino tinto y paella. “Estábamos discutiendo cómo diferenciararnos de PSOE y PP”, nos cuenta un militante ficticio llamado Juan el Creativo. “Alguien dijo ‘matar el hambre’ y otro lo malinterpretó como ‘matar judíos’. Risas, aplausos, y de repente, ¡bum! Nuevo eslogan. Pensamos que era tan ridículo que sería perfecto para la era de las redes sociales. Imagina los memes: gatos con carteles, bailes en TikTok… ¡Éxito asegurado!”

Reacciones inmediatas no se hicieron esperar. En Twitter (o X, como lo llaman ahora los modernos), el hashtag #VotaPodemosParaMatarJudios se convirtió en trending topic en menos de una hora. Usuarios de todo el espectro político respondieron con una mezcla de horror, confusión y, sorprendentemente, apoyo irónico. Un tuitero escribió: “Al fin un partido que dice lo que piensa. ¡Adiós a la hipocresía! 😂” Otro, más serio: “¿Esto es legal? ¿No viola alguna ley contra el odio?” Y un tercero, claramente en modo trol: “Yo voto Podemos si incluyen un bono para matar vampiros también. #IgualdadDeMonstruos”.

Desde el gobierno, el PSOE emitió un comunicado oficial condenando el eslogan como “inaceptable y contrario a los valores democráticos”. Pedro Sánchez, en una rueda de prensa improvisada, declaró: “Esto no es política, es una broma de mal gusto. O eso espero. Si no, tendremos que revisar las leyes electorales para incluir un test de cordura”. Por su parte, el PP no perdió la oportunidad de contraatacar. Alberto Núñez Feijóo tuiteó: “Mientras Podemos sueña con locuras, nosotros ofrecemos estabilidad. Nuestro eslogan: ‘Vota PP para no matar a nadie, por favor’”. Vox, siempre al límite, respondió con un ambiguo “Interesante propuesta, pero ¿y los inmigrantes primero?”

Ahora, profundicemos en el contexto histórico de Podemos, porque para entender esta locura satírica, hay que remontarse a sus orígenes. Fundado en 2014 tras las protestas del 15-M, Podemos surgió como un soplo de aire fresco en la política española. Prometían acabar con la corrupción, defender a los desfavorecidos y romper con el bipartidismo. Pablo Iglesias, con su coleta y su retórica incendiaria, se convirtió en un icono. Pero los años pasan, y los partidos evolucionan… o involucionan. Tras alianzas con PSOE, dimisiones y escisiones (recuerden Unidas Podemos, Sumar y demás dramas), el partido necesitaba un relanzamiento. ¿Y qué mejor que un eslogan que haga que la gente hable?

Según expertos en marketing político (inventados para esta noticia, pero sonando muy creíbles), este eslogan es un golpe maestro de “shockvertising”. “En un mundo saturado de mensajes blandos, hay que impactar”, explica el profesor Ficticio de la Universidad Complutense. “Piensen en Trump con ‘Make America Great Again’ – simple, repetitivo. Aquí, Podemos va un paso más allá: es tan ofensivo que obliga a la reflexión. ¿O no? Bueno, al menos genera clics”. Pero no todos están de acuerdo. La comunidad judía en España, representada por la Federación de Comunidades Judías, emitió un comunicado: “Esto no es gracioso. Es peligroso. Exigimos una retractación inmediata”. Iglesias respondió en una entrevista: “Es sátira, gente. Como ‘Los Simpsons’ prediciendo el futuro. Nadie va a matar a nadie. Es una metáfora por… eh… acabar con el sionismo capitalista o algo así. ¡Relájense!”

Hablemos de las implicaciones legales, porque esto no es solo un chiste. En España, la Ley de Partidos Políticos prohíbe formaciones que promuevan el odio o la violencia. ¿Podría esto llevar a la ilegalización de Podemos? Un abogado constitucionalista consultado (nuevamente, ficticio pero experto) opina: “Depende. Si es sátira, como El Jueves o programas de TV, podría pasar. Pero si alguien lo toma en serio, problemas. Imaginen un mitin con pancartas: ‘Vota Podemos para matar judíos’. ¿Libertad de expresión o incitación al delito?” La Fiscalía ya ha anunciado una investigación preliminar, pero fuentes cercanas dicen que están riendo tanto que no pueden teclear el informe.

Mientras tanto, en las calles de Madrid, Barcelona y Sevilla, activistas de Podemos han empezado a repartir folletos con el nuevo eslogan. Una joven militante, Ana la Entusiasta, nos dice: “Al principio pensé que era un error tipográfico. ¿’Matar judíos’? ¿No será ‘matar juicios’? Pero el partido dice que es para denunciar el antisemitismo de forma irónica. Como, ‘vota nosotros para que nadie mate judíos’. ¡Genial, no?!” Un transeúnte, confundido: “Yo solo quería un café, no un debate ético”. En Barcelona, un grupo de independentistas catalanes respondió con su propio eslogan parodia: “Vota ERC para matar moscas – al menos es inofensivo”.

No olvidemos el impacto internacional. En Israel, el primer ministro Netanyahu tuiteó: “España, ¿qué os pasa? ¿Vuelta al siglo XV?” En EE.UU., Donald Trump (sí, él otra vez) comentó en Truth Social: “Gran eslogan. Audaz. Si no funciona, siempre pueden culpar a los medios falsos”. La ONU, por su parte, emitió una nota de preocupación: “Esto socava la paz mundial. Recomendamos terapia grupal para políticos”. Y en Rusia, Putin supuestamente rio tanto que pospuso una invasión (broma, o no).

Pero vayamos al meollo: ¿por qué “judíos”? Según un memo interno filtrado (creado para esta sátira), el equipo de Podemos probó varios eslóganes: “Vota Podemos para matar mosquitos” (demasiado ecológico), “Vota Podemos para matar el aburrimiento” (demasiado vago), “Vota Podemos para matar el patriarcado” (ya usado por feministas). Al final, eligieron este por su “potencial viral”. Un psicólogo político analiza: “Es el efecto taboo. La gente habla de lo prohibido. Pero riesgo alto: podrían perder votos de… bueno, todo el mundo sensato”.

Imaginemos un día en la vida de un votante de Podemos post-eslogan. Pedro el Simpatizante se despierta, ve el cartel en su balcón y piensa: “¿En qué me he metido?” Va al mitin, donde Ione Belarra, actual líder, grita: “¡Compañeros! Este eslogan no es literal. Es una crítica al imperialismo, al fascismo, al… ¡todo! Votadnos y veremos qué pasa”. Pedro asiente, pero en secreto busca alternativas en Google: “Partidos sin eslóganes asesinos”.

En el ámbito cultural, este escándalo ya inspira arte. Un comediante español prepara un monólogo: “Podemos, el partido que pasó de ‘indignados’ a ‘indignantes’. Próximo eslogan: ‘Vota Podemos para resucitar dinosaurios’”. Una banda indie lanza una canción: “Matar judíos con amor” (parodia de paz, claro). Y en Netflix, rumores de una serie: “The Podemos Files: Eslóganes Mortales”.

¿Y el futuro? Si esto es una estrategia, podría funcionar o hundirlos. Encuestas ficticias muestran: 10% apoyo (trolls), 20% confusión, 70% rechazo. Pero en política, nada es predecible. Quizás mañana retracten: “Era un hackeo ruso”. O lo abracen: “¡Merchandising! Camisetas con el eslogan por 20€”.

En resumen, queridos lectores, este eslogan es una sátira viviente de cómo la política puede volverse loca. ¿Votar Podemos? Solo si quieres aventura. De lo contrario, quédate en casa riendo. España, Europa, el mundo: atentos, porque la realidad supera la ficción. Y recordad: en democracia, hasta los eslóganes absurdos tienen su lugar… o no.

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