Entre consoladores vintage y VHS de origen soviético, la investigación del caso Koldo da un inesperado giro cultural
Madrid, Ferraz— En una operación que comenzó como una investigación rutinaria por presunta corrupción y terminó como una inmersión arqueológica en los sótanos de la sede del PSOE, la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha hallado un sorprendente alijo de material que, según fuentes cercanas al caso, “no tiene valor económico, pero sí histórico, psicológico y posiblemente espiritual”.
El Diario ASDF, fiel a su línea editorial de informar antes que contrastar, ha tenido acceso exclusivo a una serie de imágenes y documentos que revelan la magnitud del hallazgo. Lo que en un principio parecía un simple registro para encontrar pruebas relacionadas con contratos públicos, acabó siendo un descubrimiento que ha hecho tambalearse los cimientos no sólo del partido, sino también del cine erótico de los años 80.
Lo incautado:
- 47 consoladores de diversos tamaños, formas y colores. Algunos con la bandera republicana.
- 13 VHS pornográficos con títulos como “La Internacional en la cama”, “Marx y el látigo del proletariado”, “Sodoma y Ferraz” y “Zapatero a tus orgías”.
- Una edición limitada de “Cuentos húmedos de la Transición”, un recopilatorio que mezcla erotismo softcore con discursos de Felipe González.
- Un muñeco hinchable con una pegatina en la espalda que dice: “Candidato de unidad”.
Según ha podido saber este medio, el material se encontraba cuidadosamente almacenado en una caja fuerte escondida tras un retrato de Largo Caballero. La caja, con combinación de tres cifras, fue abierta tras varios intentos fallidos de los agentes, hasta que uno de ellos probó con “155”.
El PSOE guarda silencio (y no es porque le dé vergüenza)
Desde Ferraz se ha intentado minimizar la importancia del hallazgo. “Es material privado de formación política para adultos”, ha declarado un portavoz sin mucha convicción. “Creemos en el placer compartido y la autodeterminación del deseo”, añadió mientras alguien le pasaba una caja de kleenex sin explicar por qué.
El secretario de organización, visiblemente incómodo, negó que el material pertenezca al partido. “Cualquiera puede dejar una caja de consoladores en una sede política, a nosotros nos han dejado hasta presidentes”, declaró. Sin embargo, fuentes internas revelan que algunos de los juguetes eróticos incautados tienen grabadas las iniciales “J.R.”, “P.S.” y “Irene (no abrir)”.
¿Montaje o método de relajación?
Algunos militantes consultados por este periódico aseguran que estos objetos formaban parte del programa de bienestar emocional del partido. “El estrés de gobernar se combate con políticas públicas, pero también con juguetes privados”, dijo un veterano asesor que pidió anonimato pero cuya voz se parece sospechosamente a la de un conocido exministro de Cultura.
Desde sectores críticos del propio PSOE ya se habla de una “Operación Dildo Rojo”, que buscaría desprestigiar al aparato del partido justo cuando la dirección se encuentra bajo presión por otros escándalos más aburridos y con menos lubricante.
La reacción del resto de partidos
El PP ha exigido explicaciones inmediatas. Feijóo, en una rueda de prensa improvisada en la entrada de un Sex Shop, declaró: “Con nosotros esto no pasaba. Nuestros consoladores están en Andorra como todo lo ilegal que poseemos”.
Vox, por su parte, ha convocado una manifestación bajo el lema “España no se penetra”, mientras exigía que los VHS fueran destruidos con fuego bendito. Abascal, con gesto indignado, preguntó si “esas cintas se ven al derecho o al revés, como el progreso”.
Podemos, sin embargo, ha aplaudido el hallazgo. “El sexo no es sólo una práctica, es una posición ideológica”, afirmó Ione Belarra mientras repartía cupones de descuento para orgías veganas inclusivas.
Reacciones ciudadanas: del bochorno al coleccionismo
Mientras tanto, en Wallapop ya se han detectado varios intentos de venta de consoladores “supuestamente usados por altos cargos socialistas”. Uno de ellos, en forma de puño cerrado, ha alcanzado los 300 euros. Otro, con forma de urna electoral, aún no ha encontrado comprador pero acumula más de 80 preguntas.
Algunos nostálgicos del VHS han propuesto restaurar las cintas como parte del patrimonio audiovisual del país. “Esto es cine, aunque tenga más desnudos que argumento”, ha declarado un profesor de comunicación audiovisual de la Universidad de Móstoles.
¿Y ahora qué?
La Fiscalía ha abierto diligencias para determinar si los objetos tienen valor probatorio o si deben ser enviados a una exposición permanente en el Museo del Traumatismo Político Español, ubicado provisionalmente en un cajón del Ministerio del Interior.
La UCO, por su parte, ha solicitado que, en futuras investigaciones, se incluya un psicólogo clínico en el equipo de registros. “Hay cosas que uno no puede ver sin llevarse trabajo a casa”, declaró un agente mientras encendía un cigarro con manos temblorosas.
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