Roman Y cardenas

Un panfleto digital acusa sin pruebas a Juan Cárdenas de delitos de odio, inventa una candidatura política que nunca existió y acaba regalándole publicidad gratuita a sus vídeos virales sobre inmigración y reemplazo poblacional.

Duruelo de la Sierra – En lo que se ha convertido en uno de los doxxeos más torpes, hilarantes y contraproducentes del ecosistema digital, un autodenominado medio alternativo de izquierdas ha intentado exponer públicamente a Juan Cárdenas, conocido tuitero y creador de contenido sobre inmigración y cuestiones identitarias. El resultado ha sido una demostración de ineptitud tan escandalosa que ha terminado beneficiando al propio Cárdenas.

El intento de “desenmascaramiento” consistía en revelar… información que él mismo ya había publicado voluntariamente en su cuenta de X. Para rematar la operación, los autores del texto decidieron aderezar la pieza con una fantasía política: afirmar que Cárdenas había sido “candidato del Partido Popular por Duruelo de la Sierra”, un pequeño municipio de Soria donde nadie recuerda su cara, su nombre ni su logotipo en las papeletas.


Doxxeo versión 1.0 beta

El artículo —con redacción digna de cuadernillo de verano— fue promocionado con entusiasmo por cuentas afines al entorno de Pablo Iglesias, lo cual no pasó desapercibido para Cárdenas, que se refirió al autor como “el yonki politoxicómano al que paga Iglesias”.

“Me ha doxxeado con fotos e información que subí yo mismo. A este paso, el próximo escándalo será descubrir que tengo cuenta en X y que uso mi nombre real”, ironizó en un hilo, acumulando miles de interacciones. La parte del texto en la que lo presentan como “ex candidato del PP” fue recibida con carcajadas: “Jajajaja, ¿pero qué se han fumado? ¿Ahora también me van a hacer concejal honorario de Mordor?”.


Proyecto Hombre, pero para redactores

La polémica no se quedó en los datos falsos, sino que además sirvió para exponer una redacción caótica, plagada de errores ortográficos y frases sin sentido. Cárdenas aprovechó para recomendar a los responsables del panfleto que acudan a “Proyecto Hombre, pero a las clases de alfabetización para adultos”.

Entre las joyas de estilo del artículo destacan perlas como “podrian calificarse dentro de la categoria de delitos de odio” —sin tildes, sin precisión jurídica y con una ambigüedad que haría sonrojar a un becario de primero de Derecho. Varios lectores señalaron que parecía redactado con ChatGPT en modo aleatorio y corregido por alguien con un diccionario de sinónimos en llamas.


“Gracias por la publi”: el doxxeo que salió al revés

El objetivo evidente del artículo era desacreditar a Cárdenas, vincularlo con delitos de odio y exponerlo al escarnio público. El resultado: uno de sus vídeos más recientes sobre el “reemplazo poblacional” superó los cinco millones de visualizaciones en menos de 48 horas.

“Me están haciendo la mejor campaña de marketing que podría soñar. Ni Vox me ha dado tanto empujón”, bromeó, compartiendo gráficas de YouTube Analytics que muestran el ascenso meteórico de sus contenidos.

Las denuncias al respecto parecen no haber surtido efecto alguno. X no ha bloqueado su cuenta, sus publicaciones siguen generando interacción, y muchos usuarios que no lo conocían han empezado a seguirlo “por pura curiosidad”.


La imaginación es gratis, la credibilidad no

El episodio ha encendido las alarmas no tanto por lo que se dijo, sino por cómo se dijo. Acusar a alguien de un delito grave sin pruebas, inventarse una candidatura inexistente y presentar todo ello en un artículo lleno de errores ha minado por completo la credibilidad del panfleto que intentó tumbar a Cárdenas.

De hecho, ni el Partido Popular ni el Ayuntamiento de Duruelo de la Sierra tienen constancia alguna de que Juan Cárdenas haya figurado en listas, papeletas o reuniones de junta vecinal. “A nosotros nos llega mucha gente, pero ese nombre no suena ni en las partidas de mus”, declaró un veterano del municipio.


Conclusión: cuando el tiro sale por la culata (con retuit incluido)

El intento fallido de doxxeo ha sido, en definitiva, una clase magistral de cómo no combatir al adversario ideológico. En lugar de rebatir ideas, se optó por el ataque personal basado en falsedades, lo cual no solo no debilitó a Cárdenas, sino que le dio más relevancia.

Ahora, mientras sus críticos continúan insultándolo entre faltas de ortografía y emojis de rabia, Cárdenas responde con una mezcla de sarcasmo, cifras de viralidad y nuevos seguidores.

“El team disgenesia ha vuelto a fallar. Que no paren. Cada tuit suyo es un clic más en mis vídeos”, concluyó en un mensaje acompañado de una foto de Vin Diesel y el lema que ya se ha vuelto un clásico en su canal: “Lo hacen por odio, pero me alimentan el algoritmo”.

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