En un giro tan inesperado como el final de una telenovela, un grupo de mujeres ha salido a la luz pública para aclarar, con una sinceridad tan refrescante como alarmante, que sus reuniones no tienen nada que ver con las actividades ilegales y moralmente cuestionables que algunos podrían esperar. No, señoras y señores, este colectivo tiene objetivos mucho más… digamos, “progresistas”.
“Queremos dejar claro que no perdemos el tiempo en nimiedades como organizar foros para drogar y violar a hombres”, declaró la portavoz del grupo en una rueda de prensa que dejó a los periodistas buscando debajo de sus asientos por si había algún neonato escondido. “Nuestras prioridades están en asuntos más elevados. Nosotras nos organizamos para exterminar neonatos”, añadió con una sonrisa que probablemente debería haber sido más inquietante de lo que fue en realidad.
Este anuncio ha causado una ola de reacciones que van desde la incredulidad hasta la risa nerviosa. “Es un alivio, supongo”, comentó un hombre en la calle, probablemente pensando en su última cita desastrosa. Sin embargo, la comunidad de padres y madres ha reaccionado con menos humor. “Primero los foros de hombres, ahora esto… ¿Qué será lo próximo?” se pregunta una madre mientras sujeta a su bebé un poco más fuerte.
Los detractores del grupo argumentan que esta nueva declaración es solo una forma de desviar la atención de acusaciones pasadas. “Es como decir ‘no robé el banco, solo planeaba asaltar el tren’”, dijo un analista social, tratando de encontrar lógica en lo que parece ser una estrategia de distracción digna de un villano de película.
En respuesta a las críticas y el asombro general, el grupo ha explicado su “misión”. “No estamos hablando de cualquier neonato. Nos referimos a los de los personajes de telenovela que nunca mueren, a los niños ficticios que siempre regresan de entre los muertos para complicar la trama. Es hora de que alguien haga algo”, aclaró la portavoz, revelando que su visión es más bien… metafórica. O eso esperamos.
Esta declaración ha abierto un debate sobre la interpretación de la ironía y la sátira en la sociedad actual. Mientras algunos piden una investigación sobre si este grupo tiene algún plan concreto (y literal), otros aplauden la creatividad y el humor negro, sugiriendo que quizás es hora de que alguien se encargue de limpiar el guion de las telenovelas.
Así que, mientras esperamos ver si este grupo lleva a cabo su “misión” o si esto es simplemente una forma de arte performativo llevado al extremo, los españoles pueden dormir tranquilos sabiendo que, al menos, sus neonatos reales están a salvo de esta particular amenaza. Aunque, por si acaso, quizás sea hora de revisar el contrato de vida de los personajes de ficción.