📍 Madrid, Canal de Isabel Segunda Parte — En una impactante revelación que ha dejado boquiabiertos a jueces, políticos, y hasta al fontanero del 8ºB, descubrimos hoy la existencia de Leire Díez, la hasta ahora ignota pero flamantemente autoproclamada Fontanera Oficial del PSOE y —por si fuera poco— vocera interina de la Fiscalía General del Estado, según ella misma.
🚰 De desatascar cañerías a atascar instituciones
Leire Díez, conocida entre los pasillos del Congreso como “la Desatascadora Progresista”, comenzó su carrera arreglando humedades en las sedes socialistas de Vallecas. “Una vez me llamaron porque se había atascado el sumidero de la coherencia ideológica”, confiesa. “No he podido desatascarlo aún, pero al menos logré instalar un grifo que da subvenciones cada vez que lo abres”.
Pero Leire no es una fontanera cualquiera. No. Leire no solo arregla caños, también los maneja simbólicamente: “Cada declaración política mía es como una gota de ácido en la fontanería democrática”, afirma mientras aprieta una llave inglesa de tamaño sospechosamente similar a un mazo judicial.
⚖️ Fiscal por cuenta propia
Pero lo que verdaderamente ha revolucionado el panorama político es que Leire Díez ha comenzado a emitir comunicados como si fuera la propia Fiscalía General del Estado. El último de ellos, titulado: “La Guardia Civil necesita un lavabo de legalidad”, ha encendido todas las alarmas.
En su declaración, Leire afirmaba que “la Benemérita se ha vuelto demasiado impermeable a los intereses del Gobierno, lo que constituye una fuga institucional grave”. Según ella, el artículo 155 de la Constitución podría “aplicarse con sosa cáustica y una buena llave Stillson si se sabe por dónde meterla”.
La Fiscalía, por su parte, ha negado categóricamente conocer a Leire. “No sabemos quién es, ni de dónde ha salido, pero nos ha dejado un presupuesto para instalar termos eléctricos en los juzgados de instrucción”, declaró un fiscal entre la incredulidad y el desconcierto.
🪠 Una agenda de plomo
La agenda de Leire está repleta de compromisos institucionales, entre ellos:
- Sustituir las baldosas morales del Código Penal por tarima flotante progresista.
- Reformar la Constitución con silicona sanitaria.
- Aplicar la ley de Memoria Histórica en tuberías de plomo para que “no se nos olvide de dónde venimos, ni lo que tragamos”.
- Supervisar personalmente que todos los informes judiciales pasen primero por el sifón ideológico del Comité de Fontanería Política (CFP).
🧻 Operación WC: La ofensiva contra la Guardia Civil
En su campaña más ambiciosa hasta la fecha, Leire ha lanzado la llamada “Operación WC” (Weaken Civil), un plan para rebajar la autonomía de la Guardia Civil mediante la instalación de sensores de humedad en todos sus cuarteles.
“Cada vez que un agente tenga un pensamiento crítico, se activará un sistema de riego que lo empapará en valores constitucionales reinterpretados por Moncloa”, explica. “Y si eso no funciona, siempre está el desatascador de competencias”.
Ante esta insólita situación, la Guardia Civil ha emitido un comunicado que dice simplemente: “¿Pero esta señora quién es?”. Lo han acompañado de una foto en la que se ve a Leire intentando desenroscar el escudo de España con una tenaza.
🚿 Un fenómeno en redes
Leire Díez no solo ejerce su poder en las cloacas del Estado, también arrasa en redes sociales. Su perfil de X (antes Twitter, antes sensato) cuenta con más de 250.000 seguidores, muchos de ellos fontaneros auténticos que la siguen “por la técnica, no por la ideología”.
En su última publicación, compartió un vídeo titulado “Cómo soldar la separación de poderes con cinta americana”, que acumula más de 3 millones de visualizaciones y un comentario del mismísimo Pedro Sánchez que dice: “A veces es mejor no saber”.
🚨 Advertencia de último minuto
Según fuentes no confirmadas (porque nadie se atreve), Leire estaría trabajando en una reforma del Consejo General del Poder Judicial a base de juntas de estanqueidad y masilla de poliéster.
Al cierre de esta edición, Leire ha sido vista entrando al Tribunal Supremo con un maletín lleno de llaves inglesas, un mono rojo y un cartel que reza: “¡No es politización, es fontanería de Estado!”