Londres. Warner Bros. ha dejado al mundo entero con la varita temblando tras anunciar que en la nueva adaptación televisiva de Harry Potter, el papel de Lord Voldemort no estará a cargo de un actor calvo, pálido y con la nariz borrada digitalmente, sino de una actriz transexual, afrodescendiente, gay, con enanismo y, para escándalo de los fans más nostálgicos, ¡con nariz! Sí, nariz completa, fosas nasales incluidas y con un ligero toque de purpurina.
La decisión ha levantado pasiones, debates y hasta guerras de comentarios en foros donde todavía se discute si Hermione podía o no ser negra en La Maldición del Hijo. Pero lo cierto es que la producción ha decidido que ya era hora de un lavado de cara. Y vaya que lo han hecho: en vez de oscurecer, afilar y aplanar la cara de Voldemort, ahora la han llenado de identidad, representación y filtros de TikTok.
El casting que hizo historia: “Queríamos al Voldemort más inclusivo posible”
Según declaraciones del director de casting, la búsqueda no fue nada sencilla.
“Estábamos cansados del típico villano blanco, calvo y heterosexual que parece salido de un casting de nazis espaciales”, explicó. “Queríamos romper con los clichés. Así que nos sentamos en la sala, hicimos una lista de todas las identidades históricamente invisibilizadas en Hollywood, y dijimos: ¿por qué no juntarlas todas en un solo personaje?”.
El resultado fue una candidata perfecta: actriz de teatro alternativo, activista queer, afrodescendiente, orgullosamente trans, abiertamente gay y con enanismo. En palabras de la propia intérprete:
“Cuando me ofrecieron el papel pensé: ¿quién no ha soñado alguna vez con ser un villano genocida en horario prime time? Yo al menos llevaba años practicando el Avada Kedavra en la ducha”.
Voldemort con nariz: el gran giro de guion
Sin embargo, el detalle que más comentarios ha despertado no tiene nada que ver con la identidad de la actriz, sino con un simple apéndice anatómico: la nariz.
“Si le quitamos la nariz otra vez, la gente no va a ver mi expresividad. Además, ya tuvimos suficientes villanos sin nariz en los 2000”, dijo la actriz en rueda de prensa mientras se ajustaba unas gafas brillantes.
Warner Bros. justificó la decisión de devolverle el tabique nasal al villano más famoso de Hogwarts con un argumento inesperado: “los filtros de Snapchat ya hacen el trabajo de deformar caras; no necesitamos gastar millones en CGI”.
Los más puristas, no obstante, se han atrincherado en redes sociales con hashtags como #NotMyVoldemort, #BringBackTheNoNose y #DumbledoreDidNothingWrong.
El fandom dividido: entre el entusiasmo y el colapso nervioso
Los foros de Potterheads se han convertido en un campo de batalla peor que el Torneo de los Tres Magos.
- Unos celebran la noticia: “Por fin un Voldemort que representa la diversidad del mundo mágico. La magia es de todos y todas, no solo de calvos sin nariz”, escribió un fan en Reddit.
- Otros, en cambio, ven un sacrilegio: “Yo crecí con Ralph Fiennes, ¿ahora qué se supone que hago? ¿Pegarle un post-it de nariz a mi Blu-ray para acostumbrarme?”
Incluso J.K. Rowling, conocida por sus polémicas opiniones en redes, reaccionó con un silencio sospechoso. Algunos aseguran que se quedó petrificada, otros dicen que está escribiendo 18 tuits consecutivos en mayúsculas, y los más optimistas creen que por fin entendió que el mundo ha cambiado.
Nueva trama: Voldemort busca representación en el Ministerio de Magia
La serie no solo modificará la apariencia del villano, sino también su arco narrativo.
En lugar de ser un mago obsesionado con la pureza de la sangre, ahora Voldemort será un activista radical que intenta tomar el control del Ministerio para exigir cuotas de diversidad en todas las casas de Hogwarts.
- Gryffindor deberá reservar plazas para drag queens con capa.
- Hufflepuff aceptará obligatoriamente a al menos un troll no binario.
- Ravenclaw deberá garantizar becas para sirenas con dislexia.
- Y Slytherin tendrá que abandonar su fama de club privado de señoritos rubios con mechas.
“Es la evolución natural del personaje”, explicó el guionista principal. “El Voldemort original quería dividir el mundo; el nuestro quiere unirlo, pero a base de rayos verdes y discursos en asambleas mágicas. Es más 2025”.
Nuevos eslóganes: del “Avada Kedavra” al “Avada Queer-davra”
La campaña promocional también ha querido aprovechar el nuevo aire fresco de la saga.
El clásico “El que no debe ser nombrado” se sustituirá por “La que no deja de ser mencionada”. Y el temido hechizo asesino “Avada Kedavra” se actualiza en la serie a “Avada Queer-davra”, un rayo multicolor que no mata, sino que cancela en redes sociales y te obliga a marchar en la cabalgata del Orgullo.
El merchandising no se queda atrás: varitas con purpurina biodegradable, capas reversibles arcoíris y, por supuesto, el muñeco Funko Pop con nariz incluida, ya agotado en preventa.
La reacción internacional: del Vaticano a TikTok
- En el Vaticano, un portavoz aseguró que preferirían no opinar, pero se les escapó un “esto con Benedicto no pasaba”.
- En Estados Unidos, varios canales conservadores ya han denunciado la serie como “propaganda woke para niños que solo quieren ver magos pegándose con palos”.
- En TikTok, el hashtag #VoldemortWithNose acumula millones de visualizaciones, con adolescentes imitando el “Avada Queer-davra” en coreografías de 15 segundos.
El futuro de Hogwarts: ¿qué será lo próximo?
Los rumores apuntan a que esta no será la única sorpresa.
- Hagrid podría ser interpretado por una influencer de cocina vegana.
- Dumbledore será sustituido por un holograma de Freddie Mercury.
- Y los dementores, lejos de chupar almas, trabajarán como coaches motivacionales que repiten frases como “¡Tú puedes con todo, cariño!”.
Warner Bros. insiste en que el objetivo no es solo entretener, sino también enseñar a las nuevas generaciones que la magia está en la diversidad. Aunque, como dijo un crítico de cine: “Lo único mágico aquí es cómo lograron enfadar a fans de izquierda y derecha al mismo tiempo”.
Conclusión: Voldemort con nariz, ¿un nuevo comienzo o el fin de una era?
Lo cierto es que, más allá del ruido, esta reinterpretación promete ser uno de los fenómenos televisivos más comentados de la década. La serie todavía no tiene fecha exacta de estreno, pero los estudios aseguran que será “cuando Mercurio retrógrado y la huelga de guionistas lo permitan”.
Mientras tanto, el mundo aguarda expectante. Algunos temen que la saga se convierta en un desfile de banderas y discursos motivacionales, otros confían en que por fin se modernice un universo que lleva veinte años repitiendo el mismo patrón de mago malo contra mago bueno.
Lo que está claro es que el nuevo Voldemort ya ha hecho historia antes incluso de lanzar su primer hechizo. Y, esta vez, podrá oler su propia victoria.
Palabras finales
Así que prepárense, Potterheads: viene una nueva era de narices, inclusión y glitter en el mundo mágico. Quizá no sea el Harry Potter que conocimos, pero sin duda será el Harry Potter que merecemos… o al menos, el que HBO Max necesita para que sigamos pagando la suscripción.