Madrid. — Pablo Iglesias, exvicepresidente del Gobierno, exlíder de Podemos y empresario a tiempo completo de la industria antifascista, ha vuelto a sorprender con un nuevo proyecto que promete dejar huella, y no precisamente en las urnas. Según confesó anoche en su programa, está estudiando la posibilidad de abrir una clínica dental como parte de su holding empresarial: “Es un servicio muy demandado por nuestros simpatizantes, y además es de justicia social”, aseguró con tono grave, como si estuviera anunciando un referéndum vinculante.
El anuncio ha generado todo tipo de reacciones, desde memes en redes sociales hasta debates encendidos en círculos políticos y odontológicos. Algunos ya hablan de la primera “clínica revolucionaria de Europa Occidental”, otros de un simple “chiringuito con anestesia”.
El origen de la idea: quejas en redes sociales
Fuentes cercanas al exlíder morado aseguran que la chispa saltó tras leer varios comentarios en redes sociales de simpatizantes que, además de criticar al capitalismo, se quejaban de los altos precios de los empastes. Uno de ellos llegó a escribir:
“Camarada Pablo, está muy bien hablar de hegemonía cultural, pero yo necesito un empaste barato antes de que me explote la muela”.
Lejos de ignorar la demanda, Iglesias tomó nota. “La gente pide soluciones reales”, explicó. “Si el capitalismo salvaje ofrece blanqueamientos a 400 euros, nosotros lo haremos por 399 y con conciencia de clase”.
Nombres en el aire
El proyecto, que se encuentra todavía en fase embrionaria, ya maneja varios posibles nombres. Entre los favoritos figuran:
- OdontoPodemos: directo y fácil de recordar.
- Muelas Unidas Jamás Serán Vencidas: un canto a la unidad dental.
- Clínica Popular Contra el Sarro: versión más combativa.
- Sonrisas del Pueblo: pensado para atraer también a votantes indecisos.
El logotipo definitivo aún no está cerrado, aunque en los despachos se baraja un diseño con un diente con coleta y un piercing de estrella roja.
Servicios con sello ideológico
La clínica no quiere ser una más. Según un primer borrador filtrado, cada tratamiento estará acompañado de un extra ideológico:
- Limpiezas dentales con lectura gratuita de fragmentos de El Capital.
- Empastes con anestesia “consciente de clase”, basada en discursos de Julio Anguita reproducidos en auriculares.
- Ortodoncia con brackets que forman consignas como “NO PASARÁN” o “Renta Básica YA”.
- Extracciones donde el dolor se mitiga con una charla de Monedero sobre el imperialismo.
- Blanqueamientos con certificado antifascista, garantizando que ningún producto proviene de empresas con simpatías neoliberales.
Además, se plantea un plan especial para militantes con muchos años de manifestaciones a la espalda, denominado “Boca Roja, Sonrisa Eterna”.
Dentistas antifascistas certificados
No cualquiera podrá trabajar en esta clínica. Los profesionales deberán superar un proceso de selección que combina odontología y militancia. Se exigirá:
- Carné de colegiado.
- Haber firmado un manifiesto antifascista.
- Declarar en público que jamás han usado hilo dental de marca blanca de Mercadona.
- Conocer al menos tres discursos de Pablo Iglesias de memoria.
En la entrevista final, el candidato deberá responder a la pregunta: “¿Qué haría si un paciente pide brackets de color azul PP?”.
La sala de espera, un centro cultural
La clínica no será solo un espacio de salud, sino también un foco de resistencia cultural. En la sala de espera no habrá revistas del corazón, sino ejemplares de Jacobin, CTXT y las memorias de Lenin. Los niños podrán entretenerse con dibujos animados de la URSS y, como toque personal, una máquina de café servirá únicamente productos de comercio justo.
Críticas y apoyos
Las reacciones no se han hecho esperar.
- Desde Vox, Santiago Abascal declaró que “Iglesias pretende adoctrinar hasta las encías de los españoles” y que “el próximo paso será poner la bandera republicana en cada muela extraída”.
- El PP mostró preocupación por el uso de recursos: “Nos tememos que por cada extracción de muela, Iglesias destine el IVA a financiar un nuevo podcast sobre comunismo caribeño”.
- Ciudadanos, en voz de Albert Rivera, aseguró que “esto demuestra que Podemos nunca fue un partido, sino un Starbucks ideológico con más franquicias que locales de kebab”.
- Izquierda Unida, en cambio, ve con buenos ojos la iniciativa: “Un empaste popular es más revolucionario que cien tuits de Echenique”.
Incluso algunos dentistas independientes han mostrado apoyo: “Mejor que la boca del pueblo esté en manos de Pablo Iglesias y no de franquicias como Vitaldent”, comentó uno en tono conciliador.
El plan de expansión: de la boca al cuerpo entero
Según fuentes cercanas al proyecto, la clínica dental es solo el primer paso de un conglomerado sanitario ideologizado. En los cajones ya circulan ideas como:
- PodemVet: veterinaria popular para mascotas antifascistas, con vacunas subvencionadas para perros que ladren contra el capitalismo.
- Fisiopodem: sesiones de rehabilitación al ritmo de canciones de la Internacional.
- PodemDerm: dermatología para curar quemaduras producidas por manifestaciones en pleno agosto.
- Clínica Popular de Oídos: especializada en recuperar la audición tras escuchar a tertulianos de la derecha gritar “¡Venezuela!” en prime time.
El marketing: sonrisas de resistencia
El lanzamiento incluirá una campaña de marketing masiva bajo el lema:
“Sonríe, la revolución también empieza en tu boca”.
Los anuncios se emitirán en redes sociales afines y en el canal de Twitch del propio Iglesias, donde dentistas antifascistas explicarán en directo cómo un empaste puede ser un acto de resistencia contra el neoliberalismo.
La economía de la muela
En lo económico, Iglesias ha dejado claro que no busca beneficios personales, sino “reinvertir en la lucha de clases”. Sin embargo, se rumorea que el plan incluye una tarjeta de fidelidad llamada “Dentista del Pueblo”: por cada tres empastes, el paciente recibirá gratis un análisis político de Monedero y un enjuague bucal con extracto de hibisco anticapitalista.
Los precios también serán simbólicos:
- Limpieza básica: 10 euros y un tuit contra Ayuso.
- Empaste: 30 euros y un comentario crítico en un vídeo de Eduardo Inda.
- Ortodoncia completa: 300 euros y asistir al menos a dos manifestaciones anuales.
El último guiño de Iglesias
Al cerrar su intervención en el programa, Iglesias resumió su visión:
“Queremos que nuestros simpatizantes sonrían sin complejos, porque una boca sana es una boca que puede gritar con más fuerza ‘¡No pasarán!’”.
Y añadió con un guiño: “Si Marx levantara la cabeza, pediría cita para una revisión. Y si Gramsci la levantara, seguro que querría un blanqueamiento dental: la hegemonía cultural empieza por una sonrisa luminosa”.
Conclusión
Mientras la idea se concreta, las listas de espera ya se están formando en redes sociales. Militantes, simpatizantes y hasta curiosos se apuntan a lo que podría ser el negocio más insólito de la década: una clínica dental ideológica, donde el empaste es revolucionario, la ortodoncia militante y la anestesia consciente de clase.
Porque, como resumió un tuit viral:
“En la boca del pueblo está la verdadera revolución, y Pablo Iglesias ya tiene preparado el torno”.
También le puede interesar
🔴 #EXCLUSIVA | Pablo Iglesias estudia la posibilidad de incorporar a su holding empresarial antifascista una clínica dental: “Es un servicio muy demandado por nuestros simpatizantes”, aseguró ayer en el programa #MalasLenguas.